Un millón de moscas no pueden equivocarse…

Siguiendo aquel dicho deberíamos ser felices al consumir «desechos»…

A qué viene todo esto?

Resulta que el 23 del presente, o sea ayer, se inauguró el ya famoso «Wallmart de Zona Norte» que han emplazado frente (cruzando la panamericana) del Carrefour de San Isidro. En principio no lo esperaba, pero la asistencia de «pobres tipos» en el primer día de apertura fue impresionante y por eso digo que parecían «moscas» buscando lo nauseabundo.

Y como siempre molestan al que no tiene nada que ver…

Fuí a buscar, como todos los días, al nene al jardín y tomamos el 430 (antes 204 A) que justamente pasa por la puerta del nuevo hipermercado. Lo llamativo era la cantidad de gente de aparente clase media desesperada por llegar a la gran inauguración, muchos viejos que apenas podía mobilizarse tratando de apurarse y con riesgo de caerse. El colectivo se llenó rápidamente y nadie viajó lo suficientemente cómodo.

Indignado, molesto y con mucha bronca empecé a expresar lo mucho que me molestaba aquella actitud. Mucha gente que salía/entraba a trabajar o que como yo iba a buscar/llevar sus chicos al colegio, estaban apelmazados por culpa de IDIOTAS que tienen mentalidades muy restringidas. Abuelos que con un andar dificultoso trataban de aferrarse a «cualquiercosa» para mantenerse en pie. Podemos ser tan idiotas siempre?

Abuelo

Lo más gracioso, aunque no me causó ninguna gracia, era ver a quienes salían de comprar. Mucha gente había comprado por comprar, uno con un pela-papas como única adquisición, otro que tenía dos prepizzas y cosas del estilo. Muy denigrante…

Pelapapas

Ni hablar de los que se quejaban porque el colectivo, esta vez correctamente, estaba parando lejos de donde estaban esperando. No tenían razón, deberían dar gracias de que paró siquiera, si no existe una parada allí, lo han forzado para acercarlos a el hipermercado. Ni media idea tienen…

Camino Bancalari

No quiero sonar demasiado rudo o viejo, pero la verdad que este tipo de cosas me hacen pensar en un país que no quiero. Me niego a pensar que vivimos de esta manera y lo peor de todo es que después nos quejamos de que nos manipulan…

Seguramente iré a ver que precios tiene este nuevo Wall-Mart, pero eso no implica que cese en mi la indignación de ver a la gente estupidizada el primer día.

Nota: Según escuché el diálogo entre dos colectiveros, uno de la línea 371 y otro de la 203, se está barajando la idea de que el municipio apruebe un «permiso especial» para que el paso de los colectivos se mueva hacia el Wall-Mart y así tener mayores ingresos acercando a la gente. Eso implica desviar sin necesidad el tránsito, más aún el de pasajeros, en una zona que ya de por sí se suele saturar por el paso de los automóviles provenientes de NorDelta, que toman el camino Bancalari para acceder a Panamericana. Desde ya tienen mi repudio a tal medida, si se llega a adoptar, y estaré presente para poner el grito en el cielo si esto ocurre. Claro, voy a ser el único, como siempre. 😛

 

¿Que diferencia hay entre ir a gastar el primer día o los siguientes, si al final ganan ellos?

Fotos: Google

Una respuesta to “Un millón de moscas no pueden equivocarse…”

  1. Halle Says:

    ¿Que diferencia hay entre ir a gastar el primer día o los siguientes, si al final ganan ellos?

    Que gran frase, te doy toda la razón, las inauguraciones son para estúpidos. Encima la gente lee la palabra oferta y no tiene la más puta idea de lo que significa. Significa, te regalo una lata de tomate a mitad de precio pero te la cobro cuando lleves el arroz, vieja forra y amarreta (Si, vieja forra y amarreta entra en la interpretación de la oferta)

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